Estudio de mercado.
Es muy importante realizar un estudio de mercado para analizar el precio medio de la zona donde se ubica nuestro inmueble y estar informado de a qué precios se están vendiendo las viviendas similares a las nuestras. También si tienes la posibilidad encarga a una empresa de tasaciones, una tasación de tu vivienda, así el posible comprador en caso de necesitar una hipoteca para adquirir tu vivienda tendrá todas las posibilidades para que la entidad financiera le conceda el préstamo hipotecario.
Margen de venta.
En muchas ocasiones cometemos un error al marcar un precio elevado para tener un margen de venta y llegado el momento de la negociación con el comprador rebajarlo. Según la experta inmobiliaria Tara-Nicholle Nelson, se trata de una táctica peligrosa. Si a nuestra casa le ponemos un precio por encima de mercado podemos conseguir que se haga invisible para los compradores. Hay que apostar por precios realistas (en la media de la zona) y aun así habrá que ser flexible con el precio de venta ante una posible negociación.
Planificación.
Otro factor determinante es que en ocasiones sobre valoramos nuestra vivienda por el deseo de obtener una cantidad determinada para poder hacer frente a la nueva casa que querríamos comprar, por ejemplo. Debemos olvidar para qué queremos el dinero y poner un precio realista a nuestra vivienda.
Objetividad.
Un error que seguimos cometiendo cuando vendemos nuestra casa o de nuestra familia directa, es no ser objetivos, debemos intentar olvidar los recuerdos que hemos vivido allí, el valor sentimental debes controlarlo para poder ser objetivo en el precio que debes fijar. Los compradores valoran más la localización, ubicación, calidad, tamaño y el estado de la vivienda.
Los precios de antes.
Olvídate de lo que valía tu casa. Aunque hasta hace poco muchos pensaban lo contrario, el mercado inmobiliario es como la bolsa, el valor puede bajar. Así que olvídate del precio que tenía tu piso hace seis meses o hace tres años y mira el precio que puede tener hoy tu vivienda, debes ser realista.